Monday, June 26, 2006

Fuera de serie

A pedido del público, cuento lo último que ha pasado en la nueva vida de piso compartido.

1. Los Simpsons
Por fin tenemos algo de popularidad y la inauguración que nunca llegó se manifiesta en diversas comidas con diversos grupos de amistades. Ya van a ser dos meses, y en algo tenía que notarse los cambios. Por ejemplo, el living ya tiene su 3ª o 4ª versión, la cual parece que será la definitiva. El mundial nos obligó a adaptar la logística para la convivencia. Nuestro amigo refrigerador pierde el protagonismo, aunque igual pasa lleno de cervezas. Queremos poner un poster de los Simpsons sentados en el sofá frente a la tele, a modo de reproducción de la nueva vida que nos espera. Esto lo digo porque mi padrino me regaló recientemente una tele, pues vio la injusticia de que mis otros compañeros gozaban del bien en sus piezas. Yo en cambio, la compartiré.

2. ¿Friends o Lost?
Por lo demás todo sigue en perfecta armonía. Me da la impresión de que muchos se esperan la pataleta o el hartazgo de alguno de nosotros, pero no ocurre. El Sebastián nos compara con Friends, puesto que pasamos en la casa. Pero no estoy de acuerdo. Jaime se nos pierde un poco, así que él sería como Lost. También me gustaría decir que estamos como en una serie de humor, tipo Scrubs, pero nuestra vida ñuñoína no alcanza a tener esa dimensión caótica o dramática. Lo que sí, el Seba está de lo más comediante, pero tampoco llega a ser Seinfeld. Creo que a estas alturas no puede ocurrir nada imprevisto.

3. Bicicletas convertidas en monociclos
Para que haya algo de acción, tengo que referirme al conserje o la vecina. En esta comunidad la gente está realmente muy loca. La señora de al lado, aun desconocida, fue vista escasamente por Lucía, la polola del Jaime. Dijo que una niña golpeó su puerta y ella abrió apenas para no ser vista. Luego están los conserjes: la de la mañana es una mujer que es extremadamente apegada a las reglas. Mira en alto al administrador, que es un pastel de primera, y está ocupada de dar a conocer insistentemente sus órdenes. La última le afectó al Sebastián, quien fue víctima del robo de la rueda delantera de su bicicleta (en el mismo estacionamiento de la comunidad). Fue ahí cuando Luz María decide darle la noticia de la nueva medida de seguridad para su vehículo: lo mejor era que lo guardara dentro del departamento. Al menos son prácticos, pero lo divertido fue que agregó “Sino vamos a botar todas las bicicletas”.

4. El CSI chilensis
Luego está el conserje de la noche, que es el personaje más turbio. Cree que nos controla a todos, inventa unas historias exageradísimas, y hasta cuenta que ha sido cabrón. Nosotros le inventamos historias a él, ya que más encima hace unas semanas cada noche lo está acompañando el conserje de la tarde. Imagínense el turno doble... da para más teorías que LOST. Además descubrimos que era él quien nos ha cortado el cable las dos veces. Así que Seba ya no lo tiene de amigo y lo encara diciéndole que si tiene algún problema, que mejor hable con nuestro abogado (que es el Jaime). Nuestros problemas con VTR los resolvemos nosotros. Mejor preocúpense de cuidar las bicicletas los barsas.

Y esa es nuestra realidad, fuera de cualquier serie. Quizá algún día veamos una basada en nosotros, cuando los conserjes nos dejen tranquilos frente a la tele con el cable.

Monday, June 19, 2006

La primera vez

He sido una persona poco polola. De hecho empecé vieja, a los 19. Por eso me extrañó que el chamán al cual entrevisté me dijera que soy dada a tener bastantes parejas. Me acompañó el Seba, quien también nació en septiembre del año 80, sin embargo a él le predijo un mejor futuro por ser hombre. Y que se fuera el 2008 a Francia, a pesar de que ya tiene comprado su pasaje para un par de meses más. Estuve poco de acuerdo con las predicciones del chamán, pero lean la entrevista (próximamente) pues hay otras cosas que sí son más acertadas.

El mismo día de la entrevista al chamán que realicé por encargo de la revista El Claneta, Claudio volvía a los escenarios como Elvis Presley. Para mí era un mito pues lo conocí cuando ya no hacía sus shows. La única vez que, haciendo zapping por los culturales canales de la televisión abierta chilena, llego a Morandé con Compañía, y estaba él,
el Niupi, haciendo el loco. Por eso esta vez partimos a San Damián para verlo y creer por un instante que vemos al mismísimo Elvis, con menos caderas pero con un particular movimiento marcial, a lo Dragonball. A veces pienso que lo que nos dijo el chamán corresponde más a la vida de Claudio, jeje.

Para el fin de semana largo nos fuimos con la Carola y la Gaby a Concón. Entramos a un pub de Reñaca llamado Shaman, comimos empanaditas y entramos gratis al casino de Viña. Turisteamos en la fauna ludópata, sacamos una tarjeta de jugador frecuente sólo porque regalaban una champaña, y salimos con luca cada una que ganamos en el tragamonedas. Tomamos fotos a pesar de que estaba prohibido, vimos a Walter Kliche que fue el personaje más cliché que podíamos esperar ver, y hasta una señora le echó la foca a la Gaby por estar mirando su juego. Ese lugar está lleno de locos.

A la vuelta de las vacaciones debo ir a una reunión que tengo en la escuela de ingeniería de la Chile. Llegando a Grecia me encuentro con hinchas de la U y la Católica tirándose piedras. Todos los que estábamos en el paradero nos metimos a la fotocopiadora más cercana y aún así nos alcanzó a llegar algo de la rica agua del guanaco. Mientras esperaba pensé, es la primera vez que manejo a 140, voy a un pub en Reñaca, entro al casino de Viña, veo a Elvis y a un chamán en persona..., sin embargo es la segunda vez que me llega agua del guanaco.

Thursday, June 15, 2006

Mi otro yo

A la Gaby la conocí en primer año de periodismo. Aunque éramos compañeras de antes, en Bachillerato, no fuimos “bachiamigas” pues ella se juntaba con un grupo de gente que eran todo lo contrario a mí. Me parecía algo cuica, demasiado buena onda, y si bien no me caía mal, su entorno, dentro de la misma sala que compartíamos, era lo peor de la especie humana que yo llegaba a conocer en persona.

Por eso condenamos a la Cargioli cuando inició su relación de amistad oculta con la señorita Retamal. Fue como si los Capuleto y los Montesco, representados en un mal llamado “Las Super 8” (que era a lo que pertenecía la Gaby) y por otro lado, nosotras cinco -¡afortunadamente indenominables!- que en ese tiempo conformábamos junto a la Berni, Pampers, Romi, Sava y quien les cuenta. Quizá porque nuestro Ojo perdió a su íntima antofagastina, que buscó consuelo en una Súper 8. Y quizá porque el lésbico cariño de las Súper 8 comenzaba a decaer con patadas por debajo de la mesa, fue que la Gaby encontró algo más que ser una cabra chica gritona en Cargioli. Así que como buenas amigas de la Romi, y por su buen “ojo”, terminamos aceptando esta infidelidad, y a este otro ser que lamentablemente se llamaba igual que yo. Y digo lamentable porque con el pasar del tiempo yo pasaría a ser “la otra Gaby”.

Total que su pasado oscuro y mi inadaptabilidad social en la UDP afortunadamente duraron poco, y ya en Periodismo, las Súper 8 se desintegraron y nació una coalición más digna: los bachiperiodistas. Luego nos empezamos a encontrar en la 227 y un día ella invitó a ver una obra de Andrés Pérez. Como el día estaba lluvioso nadie más que yo aperraba. De hecho, ni Pérez, porque canceló la obra y nos tuvimos que ir a tomar un café. Y allí comenzó una amistad ininterrumpida hasta el día de hoy. Una compañera verdadera que estuvo en todas, desde la insoportable tristeza de mi primera ruptura amorosa, a unas buenas vacaciones en Brasil, unos cuantos conciertos memorables, las peores y mejores películas y un enclaustramiento al más puro estilo de reality extremo durante nuestra ambiciosa tesis.

Dicen que tenemos curriculum casi iguales, nuestros blogs son del mismo estilo, vamos actualmente al taller de guion de Galemiri, hicimos un postítulo en Gestión Cultural, etc. Para mí las diferencias son otras. Mi otro yo es menor pero es más madura, es muchísimo más social, y está de cumpleaños hoy. Yo no tengo plata para un regalo y por eso escribo el post más cursi que verán en este sitio. Solo lo amerita la Gabona.

Thursday, June 08, 2006

Freak

Puede haber algo más freak que ver a Pin Pón, el mismísimo muñeco de algodón, interrumpir el show de cuentacuentos de Fernando. O que mis poco aclanados compañeros de colegio hagan una junta espontánea de masiva concurrencia. Encontrarle a Catalán un parecido a Felo, mi abuela probando sushi por primera vez, regalarle un peluche de Nemo a mi madre ya que buscándole regalo encontramos al tierno pez. Ver a Campos, Aliaga y Vasquez reuniéndose para un nuevo experimento musical. Bueno, nada de esto es tan freak pero lo ví en la misma semana.